La formación no sólo quema calorías y reduce su voluntad de cocodrilo . Las personas activas tienen un 15% menos de riesgo de caer en la tentación cuando se ponen cara a cara con opciones grasas y calóricas, según un estudio de la Universidad de Leeds en Inglaterra.
«El cambio en la alimentación está estrechamente ligado al estilo de vida más saludable «, dice el especialista en nutrición Fellipe Savioli, de. No sólo eso: «Durante el ejercicio, el cuerpo libera endorfinas , una sustancia que da sensación de bienestar.» Es decir, al cuerpo, esa clase de giro puede ser tan agradable como devorar un chocolatinho.
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